Para saber más
¿Dónde empieza el sonido de calidad y dónde termina? Es una cuestión que los audiófilos se plantean una y otra vez. El hecho es que las condiciones físicas del entorno ejercen una gran influencia en la calidad de reproducción de un equipo HiFi. Entre ellas está el suministro de corriente: en principio, no oímos más que la corriente de uso doméstico modulada por la señal musical. La limitación del sonido empieza si esta señal se mezcla con modulaciones e interferencias de otros dispositivos consumidores situados en la misma casa o incluso en sus proximidades: innumerables dispositivos consumidores, en especial los digitales, y las denominadas fuentes de alimentación conmutadas crean grandes distorsiones en la red de corriente, lo que constituye una tendencia en aumento. Estas distorsiones hacen que sea difícil llegar a los componentes HiFi y se sobreponen al sonido como si se tratase de una neblina. Muy pocos entusiastas del HiFi dirigen su propia central eléctrica, por lo que están avocados a depender de una red de corriente muy saturada. Para la mayoría, el sonido empieza en la caja del enchufe o en la caja de fusibles, todo lo que está más atrás queda fuera de nuestro control.